Hace unos días le escuché a Antonio Escohotado una frase que me pareció muy acertada. Interesante para la reflexión. Cito de memoria, pero venía a decir algo como lo siguiente: "Si queremos prevención para nuestros hijos, tendrá que ser prevención para el consumo y no prevención para la abstinencia".
Si vale el paralelismo, la regulación de los flujos migratorios tendrá que ser una regulación para garantizar la libre circulación de personas. Y así en otros casos.
Pese a las dificultades, me parece un supuesto realista con el que enfocar las políticas públicas. ¿Qué pensáis?
Veo que es una afirmación muy acertada y ademas como has dicho bastante realista.En este mundo cada vez mas hedonista, no puedes decir a chaval@s que algo que le gusta a una gran parte de la gente, y que ademas está presente en casi todos los actos ludicos-festivos, es malo. Muchos padres piensan que el hecho de que consuman una u otra sustancia ya es indicativo de dependencia, con esto no quiero decir que no hay que poner trabas al mismo, pero mas bien hay que controlar el abuso ,ya que el uso va a ser bastante dificil de suprimir.Quien no se toma una cañita de vez en cuando.(Quien esté libre de pecado que tire la primera piedra).
Estoy de acuerdo con Isidro Arias. La prevención en drogodependencias tiene que basarse en un análisis adecuado de la realidad. Y esta realidad nos dice que el consumo experimental (que no el consumo habitual o, más allá, la dependencia) de las drogas legales e ilegales está cada vez más extendido. Recordando a Alfredo Oliva, no se trata de poner cortapisas a la adolescencia como etapa de experimentación y maduración, sino de conseguir que se llegue a la adultez con las mejores garantías de un desarrollo adecuado y sano. Y ello quizá pase por replantearnos que entendemos por prevención del consumo y abuso de drogas...