Seis estrategias de prevención de SIDA /4
Una actividad muy frecuente consiste en organizar conferencias en las que médicos o psicólogos exponen las vías de contagio y las bases de la enfermedad. Unas veces se llevan a cabo como parte de la educación formal, y otras para el público en general. Por eso, de forma relativamente poco costosa, acercan el mensaje de salud a un gran número de personas. En ese sentido, son más eficientes como estrategia divulgadora que los grupos pequeños. Sin embargo, su efecto se reduce a la mejora del conocimiento sobre la enfermedad, y apenas tienen impacto en los comportamientos de riesgo. Además, la información no es recibida por igual por todos los participantes, y el potencial divulgativo depende en gran medida de las habilidades del educador.
No obstante, la formación en grupos grandes puede combinarse con otras técnicas, conformando nuevas aplicaciones. Por ejemplo:
- dar nociones básicas a todos los alumnos de un curso antes de concentrarse de manera intensiva en los individuos en mayor riesgo,
- o bien, instruir y sensibilizar a la comunidad para que facilite el trabajo de rehabilitación con enfermos de SIDA.